"SEÑOR K, un cómic que no hubiera dibujado un alemán".

jueves, 20 de agosto de 2009


¡BIENVENIDOS!



Este espacio está dedicado a la vida y milagros de Helmut Katzinger compilada en la novela gráfica “El Señor K”.

Este blog también pretende ser un espacio de encuentro entre el autor y los lectores, y conocer los puntos de venta en donde encontrar esta controvertida obra y más sorpresas.

Los invito a visitar nuestras secciones para conocer más sobre este proyecto.

Atte: Pavel Ortega



Reencarnación:

Click para ver en grande

Funny Nazi:

Todos conocemos el clásico saludo Nazi, pero lo que no conocemos son las consecuencias que este saludo ocasionaba diariamente.

Vean este video y las conocerán.


!BIENVENIDOS!



Este espacio está dedicado a la vida y milagros de Helmut Katzinger compilada en la novela gráfica “El Señor K”.

Este blog también pretende ser un espacio de encuentro entre el autor y los lectores, puntos de venta donde encontrar esta controvertida obra y más sorpresas.

Los invito a visitar nuestras secciones para conocer más sobre este proyecto.

Atte: El Pavel



Sobre el Autor:

Pavel Ortega.

Xalapa 18 de Agosto del 2009.



Aún recuerdo la sensación que me embargó la primera vez que fui a ver una película. Tendría como 3 ó 4 años, en el cine daban “Pinocho” de Walt Disney.

Esta anécdota quizás sin importancia me marcaría para el resto de mi vida.


Recuerdo cómo me impresionó la animación de los mares, de la ballena y cómo me sobrecogió la historia de la marioneta que soñaba en convertirse en un niño de verdad. Quizás éste seria el punto de partida para muchas de las historias que realizaría años más tarde. Desde mi más tierna edad me recuerdo siempre con un lápiz en la mano.



Pasé por la primaria y la secundaria sin prestar mucha atención a las clases y rellenando las libretas con dibujos, en especial de un gato que tuve en mi adolescencia y que tenia una mancha en el ojo izquierdo, a menudo me dibujaba a mí mismo teniendo conversaciones filosóficas con este felino. Nunca tomé clases de dibujo, básicamente me limité a jugar a ser “tal” dibujante, si por ejemplo me volvía fanático de Robert Crumb, durante una temporada jugaba a ser él aplicándolo a mis historias y a mis dibujos, pero la verdad este sistema no se lo recomiendo a nadie.



Quizás si hubiera pasado por una escuela habría llegado a dominar la técnica y el método con más rapidez pero quizá habría perdido la soltura de mi dibujo. Ahora mismo si me pusieran delante el trabajo de cualquier estudiante de la escuela de cómic “JOSO” no notaria la diferencia entre ellos. Por otra parte, también la escuela tiende a masificar dibujantes, pero por otro lado les da un nivel para poder ganarse la vida haciendo envoltorios para cereales y tarjetas de felicitación. Yo nunca tuve que hacer eso porque en realidad yo no me pensaba dedicar a esto de las historietas.


Yo tenia la idea de ser músico y acabe siendo titiritero, pero esa es otra historia.


Llegué a Barcelona en el 98 y desde que llegué asistí con mucho interés al Salón del cómic donde al principio tímida e ingenuamente, iba con la intensión de enseñar mi trabajo a ver si un cazatalentos me fichaba. Obviamente fracasé, pero ahí hice un descubrimiento, en una zona casi escondida del salón descubrí un montón de muchachos que como yo, con el simple placer de dibujar y contar historias, se auto publicaban sus historietas en fotocopias y las vendían a precio casi de coste.


Esto a pesar de ser tan simple fue revelador para mí, claro que había interés de leer aquellas historias algunas hechas con menos acierto que otras, pero casi todas cargadas de mucha honestidad, sin duda fue esto lo que me atrapó y fue así como el año siguiente llegué con uno de estos fanzines o historietitas fotocopiadas en la que narraba las aventuras y desventuras de “El Maestro” uno de mis primeros personajes creado a partir de experiencias personales, el cual fue bien recibido entre mi circulo de amistades.


El protagonista era un pintor bohemio y vividor llamado Fernando pero a quien todos llamaban “Maestro” y que hacia las veces de “gurú” de un grupo de pseudo artistas e intelectuales.


Eran tiras cómicas con un máximo de dos páginas de duración.


Una editorial de Granada “El Batracio Amarillo” se interesó por mi trabajo y fue publicándolo mes con mes en Granada para al final editar un monográfico del “Maestro” cuyo único pago fue una caja de libritos que fui vendiendo y agoté del todo.


La editorial quedo en quiebra y tuvo problemas judiciales.


Pero de no haber sido por esa primera “oportunidad” jamás hubiera continuado con esto de las historietas. Después de esta experiencia, me vi motivado a continuar dibujando historietas, para alguien como yo que viene de un país como México donde este tipo de expresiones artísticas están devaluadas por completo y donde la única aspiración de un dibujante es la de hacer cartones políticos y vivir del famoso chayote o en el mejor de los casos ser el heredero de Mafalda y hacer tiras cómicas en algún periódico o suplemento cultural, la idea de dibujar una novela gráfica es totalmente descabellada. (Bueno, no del todo si volteas a ver el trabajo de Beto Hernández al que vine descubrir ya mayor en Barcelona ya que en México no hay nadie que difunda su trabajo).


Pero ahí estaba yo comenzando el anecdotario de El Señor K. La primera historieta que dibujé del Señor K como tal era de cinco paginas para un concurso que no gané como era de suponerse pero que sirvió como punto de partida para lo que vendría después.

El Señor K comenzó a desarrollarse en apariciones de seis a quince paginas en un completo desorden que narraban pedazos de la vida de Helmut Katzinger, un hombre que había nacido Gato dentro de un fanzine llamado “Polen” que tuvo nueve números y que abarco del año 2003 al 2006 donde desarrollé toda la fauna que por ese entonces merodeaba mi imaginación. Algunos con más éxito que otros.

En el número cinco de “Polen” narré la génesis del personaje y fue el número más vendido de todos, la portada es la misma que la del libro de la novela gráfica. Para cuando me di cuenta ya tenía bastante material del Señor K y decidí darle una cierta cronología y rellenar los huecos que había dejado. Es por eso que hay algunas diferencias de estilo dentro del libro, no hay una evolución cronológica sino más bien ecléctica.


Fui vendiendo los fascículos de las aventuras del Señor K con muy buen resultado que para cuando tuve que hacer una segunda edición decidí recopilar todo lo que había hecho en un solo tomo. Me alegra que la gente lo esté aceptando tan bien.


Actualmente me encuentro trabajando en un número del Señor K que narra su juventud hasta antes de ser abducido por los extraterrestres ya que siempre había querido explayarme más en ese periodo antes de comenzar la historia donde la dejé en el libro.


Es difícil para mí mantener un orden a la hora de dibujar, siempre me dejo llevar por lo que me apetece más en ese momento. Tengo muy claro de dónde viene, hacia dónde va y quién es Helmut Katzinger y evidentemente sé muy bien cómo acaba la historia. Pero siempre hay algo que se me ocurre de último momento, sobre todo con respecto a los demás personajes que no conozco tan bien como al Señor K. A veces Helmut se queda quieto mirando lo que hacen los demás personajes, en esos momentos es cuando más disfruto la historia porque es como si ambos contempláramos y descubriéramos esa parte que desconocíamos de los demás protagonistas, como Mariana, el niño Lobo, etc.


Agradezco la posibilidad de compartir este mundo con toda la gente que de alguna manera se ha sentido identificada con él o con los personajes. Vamos a ver hasta donde llegamos.



Pavel Ortega.




Sobre el Señor K:

Por Celestino

Conocí a Pavel hace unos dos o tres años, en mi primer Salón del cómic....
Él llevaba una camiseta de Tintán y en seguida vi que era un mexicano enrollado (para más señas veracruzano, aunque no habla con el simpático acento de ellos)...

En los siguientes años nos hemos visto siempre “saloneando” y a nuestro rollo, y siempre que hemos cotorreado me ha parecido un tipo muy lúcido, pero marcado por una oscura visión de la vida....


Le entiendo, yo también he sido migrante y he estado lejos de casa, sumergido en mi batalla personal con la vida, igual que él....y es que este hombre lleva la tira de años aquí en Barcelona y ya se las sabe todas, ha atravesado golpe a golpe el largo mapa de la decepción....y sigue en pie de guerra, lo cual lo identifica como uno de los Auténticos....

Cuál será mi sorpresa cuando anoche le eché la mano a estos dos ejemplares de El Señor K (que los tenía en la montaña de fanzines que me agencié en el Saló) y me puse a ojearlos por encima encontrando un estilo que me gustó mucho, sucio y oscuro pero de trazo suelto y sensible....así que hoy mientras andaba cocinando me puse a leerlos (se leen muy bien y de una tirada)....y se me quemó la tortilla de patatas.....
Me gustó mucho.....y se me hace uno de los descubrimientos más apasionantes de este Saló....(tardío, pero justo a tiempo)....

El Señor K es un tebeo muy interesante de funny animals, que todavía no ha encontrado su lugar en el mundo pero lo logrará (igual que su autor)..... Marcado por la influencia del Maus de Spiegelman, aunque se parezca mucho más en contenido, tono y estilo al gato Fritz de Crumb (con algo del Cerebus de Sim) y que parte de esta base para llegar a través de un torrente de conciencia elíptico y tremendo al Bone de Jeff Smith (a pesar de que Pavel confiesa que sus máximas influencias son Quino y Rius), creando un personaje intolerante, Helmut Katzinger.

Un gato ex nazi, piloto de la Luftwaffe que fue abducido por los extraterrestres antes de terminar la segunda guerra mundial y es devuelto a la tierra en los años 60, donde descubre que tiene un hermano mayor que trabaja para el servicio secreto USA, una hija adulta que trabaja en un circo y cuyo novio es un León cantante que canta todo el tiempo Love me Two Times y otras canciones de los Doors....(no me puedo sacar de la cabeza hoy esa canción).


Nuestro amigo, racista, mentiroso, putero y jugador se enfrenta al mundo nuevo que le rodea y trata de adaptarse a este. Un mundo repleto de tecnología que nuestro personaje trata de entender (y eso es lo bonito del asunto....la ironía de ser un gato entre humanos y padecer su racismo siendo un repugnante racista le obligan a cuestionarse su pasado y a volverse más tolerante....aunque el bicho no deja de ser un hijo de puta....)


Pero el mundo es igual de intolerante y cruel que lo era en su época, pese a no haber nazismo, la política totalitaria USA (el autor se ceba que no veas con el tema) lo domina e impone todo, y es así como Katzinger se ve envuelto en mil aventuras espaciales luchando contra aliens, políticos, clones y demás bichería mientras se ve abrumado por los problemas domésticos que le provoca su nueva vida y su antigua/nueva familia....
Toda una joyita del fanzineo que puede provocar debido a su ambigüedad y si se lee mal, un alubión de críticas a este autor “undergroundísimo” que mola que te cagas....


sábado, 15 de agosto de 2009

En construcción:

¡ESTAMOS TRABAJANDO!


Der Fuehrer's Face (Donald Nazi)

Este video me encanta, es una caricatura que representa la propaganda anti-nazi por medio de Walt Disney en los EU.

¡Chéquenlo!

Imágenes de revistas:

Revista Rolling Stone, Noviembre 2005

Genera controversia la novela gráfica:

Señor K y los Garcimarrero en la Feria del Libro



Gandhi y Péndulo de Polanco se negaron a venderlo



No es antisemita, sino crítico al totalitarismo: el autor



Javier Hernández Alpízar.– El Señor K será presentado por los hermanos Benjamín y Magno Garcimarrero en la Feria Nacional del Libro Infantil y Juvenil, el viernes 31, a las 18:00 horas. Para el autor de la novela gráfica Señor K, Pavel Ortega, es "muy gratificante tenerlos como presentadores porque, aparte de que tienen una trayectoria humorística en Xalapa, son muy conocidos por su programa de radio", y lo que le gusta, dice, es que los presentadores "no me conocían, nunca habíamos tenido un acercamiento hasta el momento en que les pasé el libro. Les gustó mucho, quedamos de tomar un café, y la perspectiva que me dieron del libro fue otra. Borges decía que cada vez que una persona lee un libro, se reescribe; creo que eso pasó con lo que tienen preparado los hermanos Garcimarrero, que además está muy cotorro."



El humor del libro está dirigido a jóvenes y adultos, aclara: "El humor es de doble lectura, como Mafalda, que tenía cosas que no podía comprender cuando lo leí de niño. Me gustaba mucho el dibujo y todo, pero había cosas que no podía comprender, palabras, conceptos o ideas. Lo mismo pasa un poco con el Señor K."



Cuenta algunas experiencias de lectores niños: "Una amiga me dijo que se lo dio a leer a su hermanito de 10 años y que le encantó. Y hubo una mamá que compró el libro creyendo que era para niños y luego me mandó un mail quejándose de que era muy violento. Depende mucho del criterio con el que eduquen a sus hijos que un niño lo pueda leer o no. Lo cierto es que nunca estuvo enfocado para niños, no es un libro infantil en absoluto. Es más bien para público juvenil, de la edad en que yo hice ese trabajo, cuento tenía veintitantos."



El Señor K ha suscitado controversia. Al respecto, su creador opina que "ha habido gente que no lo ha sabido leer. Lo platiqué con los hermanos Garcimarrero y ellos dicen que no tiene nada que ver. Pero hay prejuicios acendrados, es reiterativo el rollo victimista de los judíos. No se permite decir una mala palabra en contra de los judíos, aunque sea en un contexto dramático y el personaje que lo dice es un nazi."



Cuando tuvo estos problemas, dice Pavel Ortega: "tomé como antecedente el Diario de Ana Frank. Hay mucha polémica y hay quienes creen que es falso, que no lo escribió Ana Frank sino otra persona, porque nunca se ha presentado el diario en manuscrito, y lo que se ha presentado está escrito con bolígrafo, pero el bolígrafo fue introducido en Alemania hasta 1950, y el diario en teoría se escribió en el periodo de los nazis. En muchos párrafos Ana Frank se refiere a los alemanes, no a los nazis, como gente inferior, que el idioma alemán incluso tiene que desaparecer, que son unas bestias. En cierta manera, la gente no se lo puede tomar a mal porque el contexto en que lo está diciendo es el de una perseguida judía que se escondía. Y en Alemania no lo han prohibido porque diga que los alemanes son una cosa o la otra."



Sin embargo, en las primeras páginas del Señor K "hay unos personajes, no es el protagonista, que hablan peyorativamente de los judíos, porque son personajes nazis, y hay gente que lo ha tomado bastante mal. No en general, sino dos o tres personas que son judías y que se lo tomaron muy personal. Es un error".



En la ciudad de México, el libro "tuvo muy buena recepción por las librerías. Lo llevamos al Péndulo, al Sótano. Pero después fuimos a Polanco, el primer sitio donde no lo quisieron. Cuando estaba en Polanco, enseñándoselo al encargado de compras y puso una cara... me di cuenta de que estaba en el lugar equivocado. No lo quisieron. Lo habían aceptado en el Péndulo de Perisur, en la Condesa, en la Zona Rosa, y ya encaminados, dije vámonos hasta Polanco, con la ingenuidad. El veinte de que estaba en Polanco no me cayó hasta que vi la cara del comprador al mirar la página donde están unos niños nazis que dicen estas palabras. Entonces me dijeron: Esto no lo vamos a vender."



Ese primer rechazo le sirvió de preámbulo, para el de Gandhi de México: "Primero lo envié y me mandaron una carta diciendo que el libro no era de interés. Yo dije, ¿cómo va a ser eso? En Xalapa se está vendiendo bastante bien, ha tenido aceptación. Se me ocurrió darme una vuelta y, al llegar, me dijeron que no podían venderlo porque Gandhi es una empresa judía, que los dueños son judíos, y no podían permitir vender un libro como ése. Dijeron que tenía un lenguaje muy violento y antisemita. Les dije que es todo lo contrario."



Y encontró otro lector que le da la razón, Benjamín Garcimarrero: Me dijo que no encontraba antisemitismo, todo lo contrario, se está burlando de los estados totalitarios como el nazismo. Pero estuvo mal leído. Creo que no lo leyeron completo, como mucha gente que opina negativamente porque no pasa del primer capítulo y se asusta."



Eso no lo desanima. En cierta manera le reconforta la polémica: "porque no me hubiera gustado hacer un libro inofensivo, que nada más contara anécdotas, lo que me gusta es que está tocando temas que la gente no quiere tocar. Que se arme ese revuelo y me digan que esta corporación de libros no quiere que éste circule... incluso me dijeron que hay un libro de Rius que tampoco se puede vender en Gandhi: No te lo tomes personal, Los Judíos, de Rius (que antes se llamó: Palestina, del judío errante al judío errado), no puede circular tampoco en las librerías Gandhi."



El libro de Pavel Ortega propone replantearnos la historia, ya que siempre la escriben los vencedores y no los vencidos: "llamar la atención de que la historia no era cómo nos la habían contado, y quitar un poco este rollo de victimarios y víctimas, porque tampoco es así. Los alemanes que vivieron la reconstrucción sufrieron igual y los japoneses de Hiroshima y Nagasaki, a quienes afectó la bomba atómica... Al fin son decisiones tomadas por motivaciones económicas y por gobiernos, no por la población. La población siempre es la víctima, aunque, en teoría, sea la que está en guerra. Las guerras obedecen a intereses económicos y no al patriotismo, como hacían creer en la antigüedad. El nazismo como doctrina toma mucho de la eugenesia y otras doctrinas que se adoptaron antes en Estados Unidos. La guerra de los nazis tampoco hubiera sido posible sin financiamiento norteamericano. La gasolina sintética, de patente norteamericana, que solamente podían usar los nazis. IBM participó del lado de los nazis, en el conteo de los judíos. Coca Cola, y el caucho con el que fabricaban las llantas para la maquinaria de guerra, auspiciado por los norteamericanos. La familia Bush se benefició del lavado de dinero cuando salieron los nazis. La historia hay que revisarla dos o tres veces, no se puede quedar uno con los libros que te dan en la escuela."



Además del tema judío, el tema nazi y la historia oficial, siempre han sido polémicos el tratamiento de la violencia en el cómic y el humor. Incluso el humor de los Garcimarrero ha engendrado alguna vez controversia. La mejor manera de ver de primera mano lecturas, controversias y aclaraciones es en la presentación de Señor K en la Feria del Libro, en el salón de actos del Colegio Preparatorio.



Los Hermanos Garcimarrero presentan "El Señor k" en la Feria del Libro Xalapa 2009:


La cita es este Viernes 31 de Julio en el salón de actos de la prepa Juarez en el marco de la 20a Feria del LIbro de Xalapa 2009.

Los Hermanos Garcimarrero presentarán la novela gráfica más polémica de los últimos tiempos: "El Señor K" de Pavel Ortega.

En punto de las 18hrs.

No falten, va a estar bueno.

Presentación en la Feria del Libro:

cartel_abril

(A todos los que se perdieron la primera presentación por ir a ver a Galeano, ahora tienen una segunda oportunidad. No hay pretexto).


Me llena de satisfacción y orgullo invitarlos a la segunda presentación de mi novela gráfica “El Señor K”


Con motivo del día internacional del libro este jueves 23 de Abril a las 20hrs, en el Foro de la Rueca de Gandhi.


(Úrsulo Galván 65 Zona Centro).


Habrá toritos y expondré algunas ilustraciones y dibujos del libro.


La presentación correrá a cargo de Omar González y Claudia Domínguez Mejía.


Señor K: Un cómic que no hubiera dibujado un alemán:

37403085

Presentación de novela gráfica y exposición de portadas.


“Que un nazi llegara a papa o a presidente de USA no es descabellado, es real”


Javier Hernández Alpízar, Xalapa, Ver.– El 26 de marzo, en el foro de la Rueca de Gandhi, a las 19:00 horas, Pavel Ortega presenta su novela gráfica el Señor K, e inaugura una exposición con dibujos y portadas. Algunas portadas “son una rareza” porque “aquí no estoy imprimiendo los fascículos, sino la novela gráfica, entonces no vienen las portadas, pero estarán en la exposición”.


Señor K es un personaje que muestra las contradicciones entre las “grandes vidas” de héroes y las vilezas de los mismos, que suelen ser menos conocidas. No solamente por ser al mismo tiempo un humano y aún gato, sino por ser, por ejemplo, un racista y un nazi.


Presentarán el libro, Señor K, Omar González y Claudia Domínguez, quienes han conocido y apoyado a Pavel Ortega desde hace muchos años: “Omar González me ayudó a conseguir mi primer trabajo como caricaturista. Creo que ya nadie se acuerda porque tenía yo 11 años, pero como era muy alto Omar dijo que tenía yo 15 y entré a una revista, aquí en Xalapa, que se llamaba Línea, y yo dibujaba una tirita cómica que se llamaba Douglas, también era un gato, ya desde entonces”.


Claudia Domínguez, asimismo, “ha estado muy vinculada a mi trabajo y ella se desenvuelve en el mundo de las letras en Xalapa”, explica el autor, al invitar a la presentación de su trabajo. Y contestó, además, a nuestras preguntas.


– ¿Cómo surgió el Señor K, hace cuántos años?


– El personaje lo he tenido en el subconsciente durante muchos años, creo. Porque está inspirado en un gato que tuve cuando tenía 15 años y estuvo conmigo hasta mis 18 o 19 años, cuando murió. Entonces lo usaba como una especie de conciencia, cuando me autodibujaba en mis historietas. Después decidí que era un personaje que podía hablar con la gente y tenía su historia.


Empecé hacer la parodia a los historiadores, porque cuando hablas por ejemplo de Picasso como un gran genio que contribuyó al arte moderno, etcétera, y ves la vida de Picasso como la cuentan sus hijos, que es una especie de monstruo o un déspota que los maltrataba: ves una dualidad. Muchas veces no se rescata toda la información, es muy difícil contar la historia, que se va haciendo a cada momento, y los libros van muy atrasados en su investigación.


El Señor K es una especie de burla a la historia. Porque es un hombre, me empezó a salir la biografía como de un superhombre, porque estuvo en la Segunda Guerra Mundial, fue piloto, llegó a ser presidente de los Estados Unidos, y otras cosas, pero al final te das cuenta de lo mezquino y lo ruin que puede ser por dentro. Esto lo empecé a hacer en una historia en 2003 y no me imaginaba que iba a llevarme por todos los derroteros que me ha llevado.


– Es un hombre, pero tiene forma de gato.


– Es como un chiste, porque me inspiré en uno de Woody Allen, del libro Sin Plumas, en un fragmento de la historia una mujer se queja de su marido y le dice: “Además, tienes plumas, y mides apenas centímetros. Todo está construido para que creas que vives en un mundo de hombres, pero en realidad ¡eres un enano!”


Esa forma en que él se ve es parte del chiste: El Señor K cree que es un hombre. Tiene una imagen de sí mismo mucho más elevada de lo que en realidad es. El es un gato. Además, como parte de la parodia, el Señor K es superracista, fue del partido nazi. Pero como gato, sufre el racismo de la gente.


– ¿Y el nombre: “K”?


– Viene del personaje de Kafka, el Señor K. Pero es también de la palabra “gato”: “katzinger”. Y es también un homenaje a Kafka, incluso por La Metamorfosis, ya que también juega un poco con eso.


– Lo curioso es la parte de lo nazi y el racismo.


– Mucha gente, cuando estuve presentando los fascículos (en Barcelona), inmediatamente los remitió a la novela gráfica The Mouse, de Art Spiegelman, quien narra el holocausto judío y usa la metáfora de que los gatos eran los nazis y los ratones los judíos. A mí me encanta. De hecho, es una novela de culto. Ganó el premio Pulitzer, lo cual es mucho decir, porque ese tipo de novelas no ganan ese tipo de premios. Entonces, también es jugar con el maniqueísmo de Spiegelman en su novela, ya sé que suena a una grosería de parte mía, pero me gustaba la idea de jugar con eso. Hay un personaje en la historia del Señor K que es un ratón y para hacerlo más evidente se llama “Señor Spiegelman”.


– La mayoría de los lectores no estamos acostumbrados a la idea de una novela gráfica, ¿qué es?


– Una novela gráfica es una historieta, pero que va mucho más allá de las historietas como se hacen en México. Lo más cercano a una novela gráfica que en este país ha ocurrido son los libros de Rius. Porque generalmente las historietas se quedan en el cartón o la tira cómica y no van más allá. Además los editores no apuestan porque vaya más allá. Por eso el Señor K es una edición de autor.


La costumbre que tenemos en México es el cartón político y la tira cómica, pero la novela gráfica es común en Estados Unidos y en Europa. Y en ella no hay un límite de páginas para contar tu historia. Es como la novela, y tienes gran libertad creativa. Obviamente, puede ir más allá de los géneros conocidos, como superhéroes y mangas, pues en la novela gráfica hay diferentes tipos.


En Estados Unidos, donde inició esto de la novela gráfica, con Robert Crumb y Daniel Clowes, se han hecho incluso películas. Está en cartelera “Watchmen”, de Alan Moore, y antes estuvo “V de Vendetta”.


– No manejas el nazismo como algo del pasado que duerme en las enciclopedias.


– Se ha hecho un mito de lo que fue en la Segunda Guerra Mundial el nazismo como para encapsularlo y estereotiparlo, para no rascarle más de lo que había más profundo con el nazismo. Mucha gente me dice: “Oye, tú eres mexicano, por qué no haces una novela gráfica que tenga que ver más con tu país. Por qué haces una sobre el nazismo, sobre Alemania”. Pero los alemanes tienen mucha vergüenza de lo que ocurrió con respecto al nazismo. El Señor K es un cómic que no hubiera dibujado jamás un alemán.


Y al mismo tiempo, me he permitido informarme mucho más en el tema. No quise tocar los estereotipos del nazismo, sino ir más allá. Muy poca gente sabe que los recursos económicos del aparato armamentístico nazi vienen de los Estados Unidos. La eugenesia, una de las cosas que Hitler defendía con respecto a la raza, viene de los Estados Unidos. Son cosas que no te las enseñan en la escuela. Por ejemplo: La familia Bush, se hicieron ricos gracias a lavar dinero de los nazis. La gasolina sintética que usaron los nazis, la tenían, porque le compraron la patente a los yanquis, y éstos no podían usarla durante la Segunda Guerra Mundial. IBM, Coca Cola: todos esos apoyaron a lo nazis. El nazismo va mucho más allá de algunas naciones, de hecho la nación que salió más perjudicada fue la alemana. Es un asunto que podemos vivir en muchos países de América Latina, pero como que no recapacitamos ni aprendimos nada de lo que ocurrió. De hecho, los judíos han hecho un monopolio del holocausto, dicen que son las únicas víctimas, cuando holocaustos han habido y siguen habiendo en muchas partes del mundo y en muchos momentos de la historia.


– Además de este trabajo en cómic, haces títeres. ¿Será porque estos temas generan a veces rechazo cuando se tratan en serio y con el humor son mejor atendidos?


– Sí, el mismo Woody Allen decía que es mejor decir la verdad en forma de chiste para que la gente se ría, porque si no te van a matar, y es cierto. Me ha tocado, aquí todavía no porque aún no es muy conocido mi trabajo, pero cuando empecé a promover el Señor K, me llegaban correos electrónicos diciendo que si yo era nazi, porque mucha gente me malinterpretó. De amigos a quienes se los he dado, algunos son de ascendencia judía, me dicen que es muy truculento. Pero el humor sí ayuda a destapar esos temas porque se tienen que tocar, ya que si no, se va haciendo un abismo muy grande en el que acabas cayendo.


– El humor tiene también un lado que nos confronta…


– A mí lo que me interesa en el humor, en el Señor K, no es tanto hacer un chiste o una frase muy elaborada para que la gente se ría. La intención del Señor K es hacer reír de las cosas que ocurren, la situación en sí. El hecho de que el Señor K sea un gato y tenga que enfrentar su condición entre la gente es en sí una situación chistosa. No se trata de hacer leña de ello, sino presentar las situaciones y, además, no de una manera exagerada. Por ejemplo, actualmente tenemos un papa que perteneció a las juventudes nazis (Josef Ratzinger, Benedicto XVI). Entonces, no es nada raro ver a un nazi que acaba siendo presidente de los Estados Unidos. No es descabellado. Y es real.


Al final, toda la ironía del Señor K no es ciencia ficción. Está documentado: casi todo lo que presenta el Señor K, como el control mental, los viajes a la Luna y todo eso, son cosas que ocurren. pero muchas personas no tienen esa información.


Así que un humor que puede llegar a verse como truculento, y un enfoque de los temas que puede parecer polémico, no son ingredientes que hagan indiferente la presentación de algo tan poco común en México como una novela gráfica, de Pavel Ortega: Señor K.


El Señor K llega a Xalapa:

cartel_final


Del Señor k se ha escrito:


«El Señor K es una crítica a los totalitarismos y demuestra que el estado fascista se extiende más allá del nazismo», señala Pavel que desde que tiene uso de razón, se recuerda con un lápiz en la mano. Inspirándose en el gato que tuvo a los 12 años, creó el personaje de Helmut Katzinger (El Señor K), protagonista de su cómic, la vuelta de tuerca a Maus de Art spigelman, que considera que aborda el holocausto judío con demasiado maniqueísmo.

VANESSA GRAELL (Periódico EL MUNDO)



Helmut Katzinger ( El Señor K), un gato nazi (sí, un gato nazi) que en una misión secreta es conducido en un avión experimental a la Luna en la que conoce a una raza de selenitas. Regresando veinte años después para, tras pasar por varios empleos, descubrir que su hija humana, no gatuna, es contorsionista en un circo polaco.

¿Cómo resistirse a una historia como ésta? Aunque se eche en falta más páginas en las que desarrollar la historia (hay mucho que contar para tan poco espacio), son las suficientes para que su autor demuestre un buen manejo del lenguaje de la historieta, por no hablar, como ya habrán podido advertir, de la enorme cantidad de referencias a la cultura pop... No se puede decir que sea plato para todos los gustos dada la variedad de especias, pero si usted tiene un estómago como los nuestros, entonces adelante.

Miguel Ángel Ferrero (SMILE Magazine)



…Pero el mundo es igual de intolerante y cruel que lo era en su época, pese a no haber nazismo, la política totalitaria USA, el autor se ceba que no veas con el tema lo domina e impone todo, y es así como Katzinger se ve envuelto en mil aventuras espaciales luchando contra aliens, políticos, clones y demás bichería mientras se ve abrumado por los problemas domésticos que le provoca su nueva vida y su antigua/nueva familia....

Toda una joyita del comic que puede provocar debido a su ambigüedad y si se lee mal, un alubión de críticas a este autor “undergroundísimo” que mola mogollón...

Celestino (La Cárcel de papel)



El SEÑOR K no lo malinterpreta nadie todos entienden que, aunque haga algo de parodia sobre el holocausto, una historia donde Bush es un lagarto extraterrestre, no tiene ninguna intención de seriedad.

Javier Candeira (Rolling Stone)



Exposición de Dibujos:

EXPO


LES INVITO EL PROXIMO 16 DE OCTUBRE A LAS 21:OOhrs A LA FABULOSA INAUGURACIÓN DE LA EXPOSICÓN DE ORIGINALES DE "SEÑOR K" EN EL "ELECTRIC BAR" DE BARCELONA C/Travessera de Gracia 233 METRO L4 URQUINONA.HABRÁ TÍTERES Y CHETOS PARA TODOS

Habrá firma de Comics y más... EL SEÑOR K

Reseña del Señor K, por Celestino:

pavel

Conocí a Pavel hace unos dos o tres años, en mi primer Salón del cómic....

Él llevaba una camiseta de Tintán y en seguida vi que era un mexicano enrollado (para más señas veracruzano, aunque no habla con el simpático acento de ellos)...

En los siguientes años nos hemos visto siempre “saloneando” y a nuestro rollo y siempre que hemos cotorreado me ha parecido un tipo muy lúcido, pero marcado por una oscura visión de la vida....

Le entiendo, yo también he sido migrante y he estado lejos de casa, sumergido en mi batalla personal con la vida, igual que él....y es que este hombre lleva la tira de años aquí en Barcelona y ya se las sabe todas, ha atravesado golpe a golpe el largo mapa de la decepción....y sigue en pie de guerra, lo cual lo identifica como uno de los Auténticos....

Cuál será mi sorpresa cuando anoche le eché la mano a estos dos ejemplares de El Señor K (que los tenía en la montaña de fanzines que me agencié en el Saló) y me puse a ojearlos por encima encontrando un estilo que me gustó mucho, sucio y oscuro pero de trazo suelto y sensible....así que hoy mientras andaba cocinando me puse a leerlos (se leen mu bien y de una tirada)....y se me quemó la tortilla de patatas.....

Me gustó mucho.....y se me hace uno de los descubrimientos más apasionantes de este saló....(tardío, pero justo a tiempo)....

El señor K es un tebeo muy interesante de funny animals, que todavía no ha encontrado su lugar en el mundo pero lo logrará (igual que su autor)..... Marcado por la influencia del Maus de Spiegelman, aunque se parezca mucho más en contenido, tono y estilo al gato Fritz de Crumb (con algo del Cerebus de Sim) y que parte de esta base para llegar a través de un torrente de conciencia elíptico y tremendo al Bone de Jeff Smith (a pesar de que Pavel confiesa que sus máximas influencias son Quino y Rius), creando un personaje intolerante, Helmut Katzinger. Un gato ex nazi, piloto de la Luftwaffe que fue abducido por los extraterrestres antes de terminar la segunda guerra mundial y es devuelto a la tierra en los años 60, donde descubre que tiene un hermano mayor que trabaja para el servicio secreto USA, una hija adulta que trabaja en un circo y cuyo novio es un León cantante que canta todo el tiempo Love me Two Times y otras canciones de los Doors....(no me puedo sacar de la cabeza hoy esa canción).

Nuestro amigo, racista, mentiroso, putero y jugador se enfrenta al mundo nuevo que le rodea y trata de adaptarse a este. Un mundo repleto de tecnología nueva que nuestro personaje trata de entender (y eso es lo bonito del asunto....la ironía de ser un gato entre humanos y padecer su racismo siendo un repugnante racista le obligan a cuestionarse su pasado y a volverse más tolerante....aunque el bicho no deja de ser un hijo de puta....)....

Pero el mundo es igual de intolerante y cruel que lo era en su época, pese a no haber nazismo, la política totalitaria USA (el autor se ceba que no veas con el tema) lo domina e impone todo, y es asín como Katzinger se ve envuelto en mil aventuras espaciales luchando contra aliens, políticos, clones y demás bichería mientras se ve abrumado por los problemas domésticos que le provoca su nueva vida y su antigua/nueva familia....

Toda una joyita del fanzineo que puede provocar debido a su ambigüedad y si se lee mal, un alubión de críticas a este autor “undergroundísimo” que mola que te cagas....

Portada a color. Interior en B/n, muy interesante...
Precios: ni puta idea (la peña hace lo que quiere), así que ahí os van los datos de contacto y la armáis con el autor:
cag_arte@yahoo.com

Bueno, pues esta reseña fue escrita por Celestino, una gran figura dentro del Comic , en su blog encontraras más reseñas bastante interesantes de otras publicaciones bastante interesantes. ojala se atrevan a visitarlo este es el link

http://www.celestinocomix.blogspot.com/

El Señor K, 18 de Abril

El Señor K is a funny animal comic that shows clear influences of Art Spiegelmann´s MAUS ( one of the characters in the book is a jewish mouse called Spiegelmaus for heaven´s sake ) but also of Robert Crumb´s FRITZ THE CAT where story and art are concerned. Other influences may have been CERBERUS or BONE but that´s mostly speculation on my part. I think the stories first appered in a comic called POLEN ( which is the reason why trhe blog is called polencomics ) which is the reason why the story is so big in scope like ONCE UPON A TIME IN AMERICA or GONE WITH THE WIND. Mister Katzinger becomes a comic version of Forrest Gump having many lives ( remember that he is a cat ) and a different career like pilot, politician or desk clerk.

With a loose style that tends more to the tradition of caricature
( something that Frank Miller used in THE DARK KNIGHT STRIKES BACK ) Pavel Ortega tells the story of Helmut Katzinger and while reading it I really was transported to another world like in the comics of LITTLE NEMO. Helmut Katzinger is the son of a german aristocratic family. His only problem is that he is born as a cat and as such becomes the black sheep of the family. Growing up in Germany during the rise of the third reich he becomes a member of nazi party and joins the Luftwaffe. By the way there is no such thing as an ex - nazi because that is mostly an ideology and a way of thinking. Sometimes Senor K is called an ex -nazi but the right term would be " former member of the nazi party " since he seems to be more of an opportunist and follower than an actual believer in the cause.

El Señor K Número 3: "La Política Apesta"

Esta reseña la escribio un lector de Alemania, su blog está en inglés y es muy interesante. También hace reseñas bastante interesantes sobre cómics y otras frikadas, si quieres visitarlo éste es el blog:

Me gustaría aprovechar para darle las gracias por la reseña.

www.talesfromthekryptonian.blogspot.com

------------------
For me it is always interesting to see how fascinated other countries like Spain are fascinated with the topic of Germany during the Third Reich. I mean it does have some kind of glamour and excitement but for me it is just business as usual since the topic is not so exotic over here. The whole comic has a surreal side like the movies of Tim Burton but also a very strong political elements like the nazis, jews, and the whole political situation of the 60s and 70s. Add to that alien abductions, political intrigue and a daughter who joined the circus and who is engaged to a lion and you get an idea why this is one of the most original comics I read in a long time. Sadly I didn´t have any extra money on the last days so the only other comic I could buy was the one where he becomes president of the United States of America.

Now on one side I was glad that the comics were 2 or 3 bucks because otherwise I couldn´t have afforded two of them. But on the other hand I feel this comic deserves to be presented in nice hardcover editions.

  © Blogger templates The Professional Template by Ourblogtemplates.com 2008

Back to TOP